He ahí el soñador,
Observando el árbol seco,
Como cualquier espectador,
Pues en su cabeza todo está hueco.
Los sueños no están,
Todo desaparece,
Las risas se van,
Aunque él no se lo merece.
De sus ojos nace un riachuelo,
Que desciende por sus hoyuelos,
Una lágrima cae y un árbol se hace,
Él mira a su alrededor y todo renace.
Observando el árbol seco,
Como cualquier espectador,
Pues en su cabeza todo está hueco.
Los sueños no están,
Todo desaparece,
Las risas se van,
Aunque él no se lo merece.
De sus ojos nace un riachuelo,
Que desciende por sus hoyuelos,
Una lágrima cae y un árbol se hace,
Él mira a su alrededor y todo renace.
Pablo Vílchez Fernández 2º E
que chulo
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