lunes, 22 de noviembre de 2010

También es mi dolor


También es mi dolor


Hoy te casarás, por fin es tu gran día, le necesitas, le quieres y lo amarás toda tu vida.

Ya han pasado varios meses – pero, ¿qué pasa?-, no eres la de antes, el amor que él te tenía se ha convertido en furia, sus besos se han hecho espinas como las que tienen las rosas…, se ha vuelto agresivo -¿no es verdad?-. No te das cuenta, pues el amor te ha cegado, te culpa de sus problemas, te usa como si fueras su saco de boxeo, no sabe escuchar pues la ira es más fuerte que su corazón, no te enseña a amar sino a odiar como odia él al mundo.

Te defiendes, le quieres hacer pagar por todo ese dolor, pero entonces tus manos se mancharán de su odio y te convertirás en la persona que es él.

Mañana, puede que no te levantes, puede que no estés aquí, pero por lo menos sabrás que no eres como él, y debes actuar pues el amor es inmenso, pero el dolor infinito.

María Mercedes Tomás Diver 1

5 comentarios:

  1. Tiene una caligrafía y unos pretextos lingüísticos muy adecuados al texto.

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  2. Me ha gustado mucho el texto que has escrito, esta muy bien redactado.

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  3. Está muy bien redactado y es muy emotivo

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  4. Muy bueno, te doy la enhorabuena María. Está muy bien redactado.

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